PRACTICA AGNIHOTRA
Una antigua ciencia dada a través de los Vedas, afirma que existen infinidad de sistemas solares, entre los cuales nuestro planeta es un pequeño punto. También nos dice que la mente y el cuerpo físico se ven afectados por los ritmos de la naturaleza, que corresponden a su vez a las ondulaciones de nuestro planeta. Al quemar sustancias específicas en el fuego y pronunciar determinados Mantras nuestra mente se aquieta. Los Fuegos de la Terapia Homa, son una ayuda material para lograr una vida feliz. De estos fuegos, es el Agnihotra el que se practica a la salida y a la puesta del sol. En estos instantes todas las electricidades, éteres y energías sutiles que emanan de éste se extienden hasta la Tierra produciendo purificación. Cuando esto sucede y al quemar las sustancias (que explicaremos en las entradas correspondientes) mientras se entonan determinados Mantras, todo nuestro ser reacciona con Amor y la atmósfera nos devuelve sus bendiciones.
En la nueva sociedad que estamos buscando, debemos ser felices cuando podemos compartir, cuando damos a los demás sin esperar nada a cambio. No se debe dar por el hecho de llenar nuestro ego o para que hablen bien de nosotros. Es fácil para muchos dar algo cuando se posee todo, pero el que también tiene poco, debe compartir. Cuantas veces vemos gente a la salida de un templo dar una limosna por sentir que así limpia su conciencia… y luego continúa actuando mal contra su prójimo… Compartiendo desde el corazón con personas que van a hacer buen uso de lo que se les da, todo se nos devolverá multiplicado.
Permanezcamos inconmovibles y seren@s aunque todo a nuestro alrededor parezca derrumbarse. Controlemos nuestra lengua…evitando hacer juicios…“lo que perjudica no es lo que entra por su boca sino lo que sale de esta”. Aplicar la paciencia y la tolerancia al exponer nuestros puntos de vista sin obstinación ni necedad…y algo muy difícil pero imprescindible: aprender a ver desde el punto de vista de los demás. No criticar, ni murmurar, pero si lo hemos hecho… perdonarnos a nosotros mismos.
Si llegan duras pruebas mantenerse imperturbables. Detenerse y serenos reconocer que hay una causa que las originó y disponerse a trasmutar. No ser crueles, ni de palabra ni contra seres vivos. No ser vanidosos, presuntuosos, intolerantes, envidiosos o rencorosos. En pocas palabras: autodisciplina de las emociones, de tu parte humana. Búsqueda del Interior…. LEY de CAUSA Y EFECTO
Cualquiera sea la religión que alguien profese, crecerá escuchando "Dios te va a castigar" y esto es una de las más grandes mentiras que la ignorancia a incrustado en la mente de la inmensa mayoría de seres humanos. Dios o como quieran llamarlo no está sentado en un trono con gesto irascible y un dedo acusador señalando a sus criaturas, mientras se divierte diciendo "a aquel lo voy a hacer un muerto de hambre, a aquella otra su marido la va a abandonar, al de más allá lo estafarán y aquel otro perderá una pierna...pero voy a dejar que unos cuantos también disfruten y sean bellos, amados y ricos..." Esto no sería un dios, sino un demonio, un ser perverso que crea seres humanos como si fuera un niño haciendo muñecos de plastilina, guardando a unos en una casita y a otros espachurrándolos. Todos nuestros sufrimientos suceden por el mal uso de las Leyes. Entre ellas la de CAUSA Y EFECTO, que dice: "Toda causa tiene su efecto. Todo efecto es producto de una causa". No existe la casualidad, sino la CAUSALIDAD. Nada ocurre porque sí. Todo el mundo más tarde o más temprano recoge lo mismo que ha sembrado. No se puede pretender sembrar discordia, odios y cosechar armonía y amor. Casualidad es sinónimo de azar y este no es otro que el nombre que se da a una causa no conocida. Si nos reclamamos continuamente que no tenemos suerte, es porque estamos desconociendo y negándonos viejos errores que causaron nuestra actual situación. Estudia las causas de tus desdichas y frustraciones y extírpalas de raíz como se hace con un tumor o cámbiala por otra causa contraria y positiva. Verás como el efecto también cambia. Buda dijo: "los efectos siguen a las causas, como la sombra al cuerpo" y a lo mismo se refería Jesús al comentar "con la misma vara que mides, serás medido".
un dogma, o sea repetir ciegamente lo que otros quieren que digamos y aceptemos porque sí, sin cuestionarlo. Los "creadores de dogmas" quieren imponerse como la única autoridad en la materia. La Ley del Libre Albedrío es la que nos da la absoluta libertad de decisión para hacer de nuestra vida y nuestro mundo lo que nos venga en gana. Podemos aprender, reconocer y aceptar todas las Leyes, pero es justamente el Libre Albedrío, único e individual el que nos va a hacer elegir entre un camino y otro. Nada ni nadie se debe interponer en nuestras decisiones. Naciste libre, siéntete así. Las leyes son como un mapa, nos marcan que por un camino, caeremos en arenas movedizas hasta hundirnos en el fango y por el otro llegaremos a una pradera. Con este mapa entre las manos no podemos reclamar que nadie nos alertó y seguiremos caminando por donde queramos. No será el castigo de tu dios, ni la fatalidad del destino la que te hizo "ahogar", ni siquiera será la "buena suerte" la que te habrá salvado. Sólo tu decisión. Tú eliges. 
